La terminación abujardada es uno de los acabados más tradicionales.
Se realiza golpeando repetidas veces con una herramienta llamada bujarda, que va punteando y labrando la superficie de la piedra hasta conseguir la textura deseada.
El conseguido final es una superficie de aspecto rugoso y homogéneo, formada por pequeños cráteres uniformemente repartidos de 1 a 3 mms de profundidad y anchura.
Esta terminación consigue sacar la tonalidad natural de la piedra consiguiendo un look cemento gris claro.
Son las 3 variables que consiguen los diferentes grados de abujardado, regulando con especial cuidado, por un lado, el tamaño y densidad del punteado, por otro, la fuerza aplicada que muestra a la cantidad de impactos y el tipo de cabezal de la bujarda que puede ser gruesa media y fina.
El uso de esta terminación es muy variado en construcciones tradicionales sobre todo del norte y centro de España, se ha utilizado en fachadas, zócalos, escaleras y pavimentos, sobre todo, aquellos que requieran de una superficie que no resbale.
Es una terminación que Arival Stone, gracias a su dureza y homogeneidad, admite con total solvencia sea cual sea el tipo de abujardado que requieran nuestros clientes.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.